miércoles, 6 de julio de 2011

Enamor

Hoy me he dado cuenta de que estoy enamorado. Lo he dicho, en mi soledad, en voz alta: ‘Estoy enamorado’. Y me he sorprendido de mi sinceridad y de no haberme dado cuenta antes. Cierto es que, yo teniendo estos años (19) y ella casi diez años más (no sé), puede sonar a amor platónico. Pero la palabra amor sigue estando presente.
Dicen que la edad es solo un número pero entre nosotros hay más que eso. Hay un universo de diferencias que me separan. Y sé de lo primero que me hizo latir mi corazón sombrío. Tu fuerza. Tu lucha ante una grave enfermedad. Tus ganas de seguir combatiendo, hasta el último aliento por tu cuerpo. Que ese demonio no se haga contigo. Y yo me creía único y valiente por haber superado otra enfermedad, una nimiedad comparada con la tuya.
El romanticismo nunca murió. Simplemente murieron aquellos románticos. Y los románticos modernos, no fueron, no fuimos tan atrevidos. Pero yo estoy vivo y en mi fuero interno arde con fuerza ese amor que nunca sentí por nadie ni nadie por mí.
Deseo luchar. Quiero llegar a ser una persona a tu altura porque hasta ahora fui todo lo contrario. Y en muchos casos deseé la muerte pero no tuve valor para encontrarme con ella. Quiero pensar como tú, que, aún cuando pueda mover brazos y piernas y el alma me aguante, sentiré todas las cosas que nunca viví y aprenderé a amar. Suspiraré llegar a tener un alma como la tuya, un alma que disfruta cada momento de vida como si fuera el último, soñando con que el último sea dentro de mucho tiempo y, siendo esto un amor platónico, esperando que alguien te ame como yo nunca lo seré capaz.

D.B.G. Declaración de amor, A C. S. 01 de Mayo de 2011

miércoles, 12 de enero de 2011

Pendiente de título III

El murmullo de las hojas
El sonido del agua fluyendo por los arroyos
y el de los pájaros piando en las ramas de los árboles.

Se convertía

en una melodiosa canción
que todos los días
se repetía.


Pues aquel lugar
pasados los años
se convirtió en mi hogar.
Y aquellos maravillosos sonidos,
en mis vecinos.

Sin fecha. Tendría yo unos 13-14 años. Encontrado en carpeta entre facturas del gas y recetas de cocina.

sábado, 1 de enero de 2011

De Colores

Miles de luciérnagas flotando, a cámara lenta, entre troncos y ramas de árboles. En esta zona del planeta, las luciérnagas consiguen crear todas las tonalidades del arco iris. De día, apenas se ven dos o tres, pues se esconden detrás de las hojas. Descansan. Esperan el anochecer. Los gorriones de alas plateadas chillan alocados, excitados, buscando un sitio para contemplar el maravilloso espectáculo. Los forasteros que atraviesan las sendas en busca de lugares de cuento creen que el cielo se ilumina a su paso. Que les están esperando. Pero, solo las curiosas criaturas del lugar saben que las luciérnagas no hacen caso a nadie. Ni entre ellas mismas existe gesto de competitividad. Se iluminan para la noche. Para sentirse, por un breve momento, parte del mundo de los sueños. El ritual que inician todos los días a la medianoche se describe como un baile. Una ascensión en espiral más allá de las copas de los árboles. Pero al verlas, descubres que es un estado de ánimo. Sensaciones. Felicidad.

2010. Mientras escucho 'Cosmic Love' de Florence and the machine.